Me contaba ayer uno de mis mejores amigos que otro amigo suyo frecuenta uno de esos lugares de intercambio de parejas.
Por lo visto, él y su mujer suelen ir a un club en el que varias parejas se conocen en una cafetería y allí mismo, charla va, charla viene, los que se gustan y caen bien deciden irse a un lugar más discreto. Anonadada estoy.
Al preguntarle cómo es que algo así le gusta, el tipo comentaba que era un poco raro al principio.
- Hombre, miras al lado y ves que tu mujer se lo está comiendo a otro y te sientas raro... pero luego te miras y te das cuenta de que a ti te lo come la mujer del otro, así que todo está bien.
En fin. No tengo palabras ante semejante declaración.
En todo caso, la cuestión no es esa. La cuestión es qué puede llevar a una pareja a practicar este tipo de vida. Ojo. Me parece respetable si ambos están de acuerdo y se lo pasan bien. No quiero entrar en juicios morales ni nada de eso. Sólo me pregunto qué hace que el intercambio de parejas sea tan atractivo para tanta gente. Quizá la razón se encuentre en el aburrimiento y la rutina de la que hablaba en otra entrada. O simplemente en el morbo de ver a tu pareja con otra persona. O el deseo de probar cosas nuevas.
Por lo que mi amigo me ha contado, parece que la feliz parejita se ha enganchado mucho al tema, y han pasado de ir al club de marras de vez en cuando a ir prácticamente todos los fines de semana. Algo tendrá el asunto.
6 comentarios:
Pues eso mismo: lo de tu titulo. Yo no lo haria, soy muy posesiva con lo mio.
Desde luego a mi ver a mi pareja (en caso de que la tuviese) con otra gustar no me gustaría en absoluto a pesar de que yo pudiera estar con otro. Además, en mi opinión, cuando prefieres estar con otr@ a con tu pareja es porque algo falla ¿no? Pero eso, lo que dices, sobre gustos...
yo opino que esas prácticas pueden poner en peligro la estabilidad de una pareja. claro que, si una pareja necesita semejantes estímulos, es posible que algo falle previamente, pero bueno, no vamos a juzgar, porque cada caso es un mundo...
pero insisto: si una relación se estropea por problemas que puedan surgir en la convivencia, pues bueno, son cosas que pasan en la vida... pero poner en peligro una relación por hacer el experimento de acudir a uno de estos locales, que además me imagino que no serán de acceso gratuito precisamente, como que no lo veo claro...
Cuando se necesita cambiar de pareja es porque ya no hay la intimidad necesaria con la tuya, ni queda nada. Ante eso es mejor cerrar la tapa y comenzar otro libro, no andarse con inventos que no llevan a nada. Todo eso lo único que deja es vacio interior, esa es mi opinión...
Besos!
Ni de coña, vamos, ni se me ocurre. No podría soportarlo, no podría mirar a mis hijos
¡qué disparate!
Pero claro, ya lo dices tú, sobre gustos...
Parece que estamos todos de acuerdo. Yo estas cosas no termino de comprenderlas, y por más que intento imaginarme en esa situación, no puedo.
La gente se aburre muuuucho.
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