No es la primera vez que hago un post con este título, pero es que la primavera (o lo que sea que estemos padeciendo en este momento) siempre invita a limpiar la mente, el cuerpo y el armario de porquerías que no nos hacen ninguna falta.
Mientras la mayoría de mis conocidos están en plena fase de librarse de los kilos de más de cara al verano, yo lo que pretendo es librarme de los kilos de ropa que no me pongo.
Mirando entre mis porquerías me doy cuenta de que tengo auténticos horrores que ni siquiera entiendo por qué compré. ¿En qué estaba pensando? No soy una compradora compulsiva, y menos en estos tiempos que corren, pero de alguna manera siempre me las acabo arreglando para tener cosas que me parecen absolutamente horripilantes.
Un abriguito de pretendido estilo años cincuenta con hilitos plateados, cuello redondo de niña tonta y hechura de señora embarazada. ¿Adónde voy con esto? En serio. ¿En qué estaba pensando?
Una chaquetita de punto que me pareció monísima en su momento y que me he puesto DOS veces porque me encuentro ridícula con ella. Me está corta y ancha. Un horror. Cada vez que la veo me parece que es la toquilla de mi abuela. De todas formas a lo mejor la guardo para ponérmela en casa, es muy calentita y apropiada para cuando hago punto de media. Sobre todo cuando llevo los rulos puestos (del tema rulos ya hablaré en otra ocasión...)
¿Qué empuja a las mujeres a comprarnos ropa que nos parece ideal de la muerte en la tienda y que apenas unas semanas después no podemos explicarnos cómo pudo llegar hasta nuestra casa? No me considero una mujer de mal gusto, pero tengo algunas cosas que ni son de mi estilo, ni me gustan, ni me quedan bien ni eran particularmente baratas. ¿Qué hacen en mi armario? Y lo peor de todo. ¿Por qué me ocurre esto una y otra vez?
7 comentarios:
a mí la ropa de otoño-invierno me da mucha pereza comprarla. en cambio, la de verano me hace mucha ilusión. de verano tengo muchas cosas en proporción con el resto.
los gustos cambian. lo que en cierta época te parecía lo más cool, hoy no te lo pondrías ni muerto.
a veces se hacen bromas sobre las chicas que tienen el armario hasta arriba y no tienen nada que ponerse, jeje. supongo que no hay nada que encajen con el estilo que buscan en un momento determinado.
A mí me pasa al revés, Chema. Tengo mucha más ropa de invierno que de verano, y claro, ocupa mucho más. ¡Cómo se nota que vivo en el norte! Aquí el verano dura un mes. Ahora mismo, está lloviendo y hace un frío que pela. ¡Y estamos terminando abril!
Me encanta el frío, pero hay días en los que agradecería tener un poco más de luz.
Pues para eso lo que necesitas es un armario más grande. Yo tengo todo a la mano, lo de invierno y lo de verano, pero sí, el año pasado hice una limpia de cosas de esas que llevaba siglos sin ponerme...o nunca.
Bssssssss
Cloti
¡Cómo me gusta!¡Cómo disfruto! Es una de mis aficiones, igual cocino, que coso que ordeno mi armario. No hay cosa que me guste mas que quitar ropa de mi armario. Al contrario que Cloti, solo tengo la ropa de temporada en mi armario, el resto lo bajo al trastero. Es decir que al menos dos veces al año cambio el armario completamente.
Odio esos armarios con la ropa apretujada, en los que no se ve muy bien lo que hay dentro.
La ropa que quito se la paso a mi hija y a la chica que me ayuda en casa.
Ah y alguna vez la ropa que le he pasado a mi hija y que se ha puesto un par de años, vuelve al mío otra vez... para entonces ya es vintage.
Pues en mi caso, no se porqué me cuesta mucho trabajo desprenderme de la ropa aunque haga siglos que no la pongo, lo que no quita que un día en un arrebato no me libre de unas cuantas prendas pero me pasa pocas veces, jajajjaja. Inma, odiarías mi armario porque más apretujado no se puede estar, jajajaja
Cloti, no sólo tengo un armario grande sino que tengo tres armarios repartidos en diferentes estancias, pero al igual que a Geno, me da por guardar cosas de hace la tira de años y eso dificulta las cosas. Y luego está el problema de las muñes: hay prendas que no tiro aunque ya no me ponga porque me gusta la tela y la aprovecho para coser tonterías, así que aunque retiro ropa, luego la sigo teniendo en los armarios porque se la ponen Barbie y Nancy. De verdad que no tengo arreglo...
Inma, a mí también me gustan los armarios ordenados, limpios y espaciosos. Hago limpieza un par de veces al año y lo ordeno todo, pero al poco tiempo vuelve a estar todo igual. Me falta disciplina en el día a día.
uy, Shirat, eso nos pasa a todas, en mi caso al tener dos embarazos muy seguidos tengo ropa que me entra muy justa o "bajo lorza" de tripa y la tengo ahí en espera de que una fuerza de voluntad poderosa me obligue a hacer dieta, aunque con la excusa de la lactancia tampoco me animo... Luego está la ropa que aún me compra mi madre, blusones exagerados que acaban en el fondo... y pantalones que te compras en un alarde de optimismo y luego te miras y te remiras por detrás y dices... jo, si me hace mucho culo o se me clava en... muchas veces las prisas... en fin... por no hablar de estampados que te parecían muy hippies y muy molones y ahora los veo histriónicos.... (me estaré haciendo vieja :P )
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